top of page
  • Adrian Lucas

Sueños cumplidos y ropa con historia: el auge de la segunda mano en Murcia

Siempre me he considerado una persona nostálgica. De hecho, bastante nostálgica. Tan nostálgica que incluso añoro cosas que ni siquiera he vivido, ¿qué le voy a hacer? No me cuesta reconocer que cada vez que veo una serie ambientada en los noventa o escucho música de esta época, algo dentro de mí parece despertar de una hibernación y querer salir fuera para calzarse unos tejanos y una camiseta con algún logo retro. Sin embargo, en lugar de sentirme abatido por la batalla interna que me produce pensar que todo tiempo pasado fue mejor, me consuelo sabiendo que como yo hay otra infinidad más de soldados que también han caído en el mismo foso en el que me encuentro; en el de la asimilación. Mal de muchos, consuelo de melancólicos.

Trainspotting - 1996 (Pinterest)


Si no lo hemos hecho ya, creo que deberíamos aceptar la idea de que nunca seremos los protagonistas de “Friends” por más que intentemos imitar sus looks. Ahora bien, no podremos ser ninguno de ellos, pero siempre nos quedará la ropa vintage como alternativa para lucir la mejor versión noventera de nosotros mismos. Eduardo Abellán, estudiante de Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad de Murcia, es de estos últimos:“Unos amigos hace unos 4 años me propusieron ir a ver algunas tiendas de ropa de segunda mano, la típica época en la que ves muchas películas de hace unos años con outfits icónicos, y poco a poco le coges cariño a la estética y la vas buscando para ti; pero como por entonces las tiendas de ropa más convencionales tenían un estilo muy distinto, buscas ropa en tiendas de segunda mano”.


Podría ser el “ciclo de la moda” el responsable de que siempre recurramos a las prendas vintage, pero es indudable que las redes sociales también cumplen un protagonismo clave en este revival estético. Se calculan por decenas las cuentas de Instagram que gracias a sus fotografías de archiconocidos celebrities de los noventa, ahora re-maquillados con un filtro retro y excesivo granulado, nos hacen darnos cuenta de que atuendos como los de Angelina Jolie en “Inocencia Interrumpida” (1999) o Leonardo di Caprio pueden estar tan cerca de nosotros como tengamos de casa una tienda de segunda mano. Además de este tipo de cuenta de inspiración, también encontramos otras que se rigen por la ecología o la sostenibilidad, como la gestionada por Esmé White (@pocketsizethrifter), en la que “enseña prendas y conjuntos exclusivamente de segunda mano e intenta concienciar a sus seguidores sobre el consumo del fast-fashion y el impacto que tiene en la Tierra”, nos explica su compañera de piso Belén Mc Menamin García, quien se interesó por este tipo de prendas gracias a ella.

Angelina Jolie en "Inocencia Interrumpida" (1999) - Leonardo Dicaprio en "Romeo + Julieta" (1999)


El consumo de ropa de segunda mano es un fenómeno que se extiende por el planeta cada vez a mayor velocidad y Murcia no se iba quedar atrás en acoger esta realidad. Isabel Martínez, estudiante de Periodismo, conoció este tipo de moda gracias a un mercadillo de ropa en Santa Eulalia organizado por el Ayuntamiento: “Hasta la fecha nunca había visitado ningún mercado o tienda de segunda mano. En general aluciné con cada una de las prendas que había, además de todos los accesorios y complementos recuerdo que había de todo, zapatos, joyas, cinturones etc.”


Si hablamos de ferias es de extrema obligatoriedad mencionar el mercado de La Fama, donde entre organillos eléctricos, conversaciones ajenas y griteríos que nos sacan una sonrisa tímida (ahora oculta por la dichosa mascarilla) nos encontramos con tesoros escondidos que a muchos fascinan y a otros hacen sacar su ¿clasismo encubierto? Posiblemente sea así porque cuando de ropa de segunda mano se refiere, caer en estereotipos y prejuicios es algo tan común como sencillo, viniendo sobre todo de aquellos que rechazan la ropa por no ser “de marca”. La solución a esto radica en “evolucionar en muchos sentidos”, de deconstruirnos. Dejemos de relacionar estas prendas con calificativos que no les hacen justicia para empezar a pensarlas como algo más que meras prendas de vestir, como hace Belén: “No solo estás comprando prendas de ropa, estás comprando una prenda con una historia detrás. Siempre me hace mucha gracia cuando compro prendas de ropa y se nota que las han arreglado, o les han cosido algún detalle. Muchas personas ven esos detalles como defectos, pero yo lo veo como un toque personal”.


Como para nosotros, los “indies sueltos por Murcia”, no basta con un mercadillo, necesitábamos más lo y necesitábamos ya. “Una de las cosas principales sería traer más tiendas de ropa de segunda mano a Murcia centro, ya que creo que de momento no hay suficientes en comparación a otros sitios” admite Belén a cuya opinión se suman también el resto de entrevistados. Así lo queríamos y así ha sido. Alternativas como Flamingo Vintage (Plaza San Julián, 1, 30004 Murcia), Locoloco Vintage (Calle San Carlos, 15, 30003 Murcia) y Mara Monky Vintage (Calle Trinidad, 5, 30003 Murcia) han llegado a Murcia para brindarnos con el mejor de los rollos retro, aunque otras ciudades se nos hayan adelantado: “en cuanto visitas Madrid o Barcelona y comparas la oferta que hay en dichas ciudades, la de Murcia se queda muy corta. Sin embargo, poco a poco he descubierto algunas tiendas en barrios de amigos que no conocía”. Pese a que la oferta cada vez sea mayor, siempre hay algo en lo que podamos mejorar y en ese caso, Belén, una murciana actualmente afincada en Reino Unido, recomienda que Murcia podría acoger a las conocidas anglosajonas “charity-shops” en las que “por cada prenda que compras en estas tiendas, tu dinero se dona a empresas caritativas o para investigación de enfermedades”.

Flamingo Vintage / Locoloco Vintage / Mara Monky Vintage


Los jóvenes de la Región comienzan a ver esos cambios que tanto ansiaron en algún momento. Una Murcia que acoge la sostenibilidad, el ecologismo o la moda es lo que echábamos en falta. Una Murcia que nos brinda cada vez más oportunidades para sentirnos augustos en ella es lo que necesitamos. Una Murcia libre de prejuicios es lo que somos. Y yo, una persona nostálgica que añora cosas que ni siquiera ha vivido, he dejado de serlo porque eso mismo he empezado a hacer, a vivir lo que añoraba.


 

Shoutout a esta gente tan maja <3

Por orden de aparición: Eduardo Abellán, Belén Mc Menamin García e Isabel Martínez

bottom of page